27 de agosto de 2008

Estaba sentada mirando la ventana cuando de repente un viento resopló y movió mi pelo. Un escalofrío recorrió mis venas y una lagrima callo por mis ojos. Estaba confundida, aturdida, no entendía nada, tenia ganas de gritar pero no me salía la voz, mi cuerpo se inmovilizo por un instante, mas bien mi cabeza, es decir, no podía pensar, quería entender por qué estaba llorando buscaba en los recuerdos del día pero no había pasado nada ‘’tragico’’ como para estar en ese estado. De un instante para otro dejé de llorar y todo parecía calmarse otra vez, pero yo seguía sin comprender. La confusión me venció y fui a mi pieza a ver si ahí podía ver lo que pasaba. Me quedé dormida profundamente, hace mucho no me pasaba eso, pero se ve que el sueño después de varias noches de no descanso fue más fuerte así que finalmente dormí por una hora y un poco más y cuando desperté estaba en otro estado emocional completamente distinto, no digo que estaba de buen humor, pero si había dejado esa angustia sin sentido, aunque ahora me está volviendo. No se que es , lo único que se es que me esta costando un poco, mucho, demasiado.